¿Qué es una ETAP?
Cuando hablamos de la gestión del agua potable, es inevitable preguntarse de qué forma el agua, desde sus diferentes procedencias, llega a nuestros hogares convertida en agua apta para beber. Como mencionamos en anteriores artículos, los sistemas de abastecimiento recogen agua desde diferentes procedencias: ríos, arroyos, embalses, pozos, manantiales, aljibes, entre otras. Una vez almacenada esa agua bruta no tratada, es cuando entra en juego la ETAP.
Cuando hablamos de la ETAP nos referimos a la Estación de Tratamiento de Agua Potable, también conocida como Potabilizadora. Se trata de una instalación industrial en la que se realizan los tratamientos oportunos para, precisamente, hacer que toda esa agua recogida y almacenada desde diferentes orígenes, se convierta en un agua completamente salubre y apta para el consumo humano.
¿Cómo funciona una ETAP?
A pesar de que su apariencia a primera vista es la de un agua perfecta para consumir, el agua que llega a las potabilizadoras contienen numerosos contaminantes nocivos para la salud. Estos contaminantes biológicos, químicos e incluso radiactivos, deben ser eliminados por completo mediante los tratamientos pertinentes.
Aunque existen diversos tipos de plantas potabilizadoras, normalmente, para conseguir este fin, llevan a cabo una serie de procesos continuados cuya secuencia generalizada es la siguiente:
- Pretratamiento o presedimentación: El agua llega a unos grandes depósitos en los que se eliminan los sólidos sedimentables. Las partículas con mayor peso caen al fondo cuando se paraliza el movimiento del agua.
- Floculación: el proceso de coagulación o floculación consiste en agregar aditivos químicos al agua para favorecer la sedimentación de materia coloidal no sedimentable o bien acelerar la sedimentación a través de la formación de flóculos. Los flóculos son conjuntos de partículas pequeñas aglutinadas en partículas más grandes y con mayor capacidad de sedimentación.
- Sedimentación: Por el efecto de la gravedad los flóculos se decantan al fondo de los depósitos para ser eliminados.
- Filtración: El agua pasa a través de un medio poroso que se encarga de retener las impurezas restantes. Una vez finalizada esta fase el agua estará completamente limpia, aunque aún no será apta para el consumo.
- Desinfección: En esta fase se reduce la carga bacteriana del agua. Este tratamiento se realiza con diferentes métodos, bien sea ozono o rayos ultravioleta para su posterior cloración que conseguirá un agua limpia y, ahora sí, totalmente potable.
La llegada del agua al hogar
Tras la desinfección, antes de llegar a los hogares, el agua ha de pasar estrictos controles que verifiquen la calidad real del producto obtenido en la planta potabilizadora. Así, en España, es el Sistema de Información Nacional de Agua de Consumo el organismo que se encarga de este control y de la recogida de datos sobre las características y calidades del agua procedente de las ETAP.
Una vez verificada esta calidad, el agua se almacena en depósitos cercanos a las plantas potabilizadoras hasta su transporte hacia los hogares, recibiendo un aporte de cloro que favorece su conservación en esos depósitos.
Comment (01)